Para crecer, apunta, aunque sea mal

 

Cuando hablo con gente sobre hacer el programa “Self Autoring”, frecuentemente lo aplazan y no es sorprendente porque es difícil.

Pero hay más, piensan: “No sé cómo escribir, voy a hacer un mal trabajo, no me gusta tener deberes, voy a tener que hacerlo perfectamente, tengo que esperar hasta que tenga tiempo suficiente”. Una de esas razones es suficiente para pararte en seco y las cinco en conjunto, estás acabado.

Por lo que le digo a la gente: “Hazlo sin un orden concreto, un pequeño paso cada vez y mal. Porque puedes hacerlo”.

Cuando mis estudiantes están haciendo la tesis del master les digo: “Escribe un primer borrador realmente malo”, y luego tenemos una pequeña conversación al respecto porque no creen que lo digo en serio. Porque suena como un cliché en cierto sentido, no es un cliché, no es un cliché en absoluto, significa: eres un escritor terrible pero si alguien te apuntase con una pistola en la cabeza y dijese: “Tienes que tener preparada tu tesis de cien páginas para el próximo lunes o te dispararé, pero no me importa cuán terrible sea”.

Te sentarías y la escribirías. Y el caso es que lo tienes, ¿verdad? Entonces tienes algo y puedes arreglarlo, puedes repetir y arreglarlo, ese primer borrador malo es la cosa más valiosa. Eso es lo que necesitas, necesitas un primer borrador malo de ti mismo!

Hay una idea que desarrollo Jung sobre el pícaro y el bufón, el cómico. El pícaro es el precursor del salvador, esa es una de las cosas que aprendí de Jung que era… Es tan improbable, nunca lo pensarías, es tan increíble que eso pudiera ser así pero el satírico y el irónico y el crea problemas, el cómico ¡el bufón! ¡El bufón es el precursor del salvador! ¿Por qué?

Porque eres un bufón cuando empiezas algo nuevo. Si no estás dispuesto a ser un bufón, entonces nunca empezarás nada nuevo y si nunca empiezas nada nuevo, no te desarrollarás.

La disposición a ser un bufón es el precursor a la transformación y eso es lo mismo que la humildad. Así que si vas a escribir tu destino, puedes hacer un mal primer trabajo.

Te vas volver más inteligente según vayas avanzando, ¡Esa es la cuestión! Algo que llama, eso es lo que ocurre aquí, quizá la estrella a la que Gepetto deseo era la maldita estrella, pero al menos era una estrella, al menos estaba en el cielo, al menos le hizo avanzar! Algo te captura y te llena de interés y piensas: “¿debería hacer eso?”.

Y la respuesta es: “Si no eso, entonces algo”. ¿Y si es un error? Es un error, puedes estar seguro. ¿Qué sabes? Vas a tropezar de un lado para otro y esto es lo que va a suceder:

Te vas a mover, no vas a quedar en el inmovilismo, no te vas a quedar dando vueltas en círculos y veo a gente así. Ellos dicen: “Nunca supe qué hacer y ahora tengo cuarenta”.

Eso no es tan bueno. Eso no es tan bueno. Hay estudios que sugieren que la gente es mucho más infeliz cuando echan la vista atrás a su vida sobre las cosas que no hicieron que sobre los errores que cometieron mientras estaban haciendo cosas. Por lo que también merece la pena pensar sobre ello porque hay errores redentores y un error redentor sería un error que cometes cuando sales a intentar hacer algo y piensas: “Voy a intentar hacer esto”. Pero no se te da bien, cometes una serie de errores, ¿Cuál es la consecuencia si prestas atención?

Ya no eres tan estúpido. Esa es la cuestión, has sido informado por los resultados de tus errores así que lo que ocurre es sigues la baliza, sigues la luz y estás ciego así que no sabes dónde está la luz, se aprecia tenuemente y te da miedo seguirla pero decides andar a traspiés hacia ella. Según das traspiés hacia ella, te instruyes e ilustras e informas debido a la naturaleza de tu experiencia. Porque estás entrando en tierras en las que no has estado todavía.

Aprendes algo. Lo que ocurre entonces es que la estrella se mueve. Te acercas diez pasos y piensas: “No, no es correcto, no lo he hecho bien. No está ahí, de hecho, está allí”. Entonces la ves en otro lado y cambias ligeramente y avanzas. Eso es lo que ocurre. Continúas según cambias, la cosa que te guían hacia adelante se mueve.

Es como Dios en el desierto, en Egipto, el pilar de luz que estás siguiendo, se mueve, no es algo permanente. Te mueves hacia él y se aleja, te guían hacia adelante.

Dices: “¿Es el paraíso aquello a lo que estoy apuntando?” y la respuesta a eso es: no, porque, ¿Qué sabes? No podrías ver el paraíso aunque estuviera justo frente a ti pero podrías conseguir un atisbo de él. Así que te acercas hacia él y creces y entonces, la próxima vez que abras los ojos verás con un poco más de claridad.

Eso es lo que ocurre, eso ocurre una y otra vez. Se sigue moviendo. Por lo que te mueves así.

Pero lo que resulta genial es que todos esos zigzagueos, cada uno de esos zigzagueos es una catástrofe. He chocado contra un muro, Dios, y luego tuve que morir un poco y apenas había conseguido levantarme. Es una transformación de Fénix en cada giro. Es doloroso pero la cuestión es que aunque hayas recorrido veinte millas, digamos, en esa carretera y solo te has desplazado tres millas hacia delante. Te has desplazado tres millas hacia delante en vez de caer hacia atrás.

¡Porque esa es la cuestión también, si te quedas quieto, caes hacia atrás! ¡No puedes quedarte quieto porque el mundo se aleja de ti si te quedas quieto!

¡No hay inmovilismo, solo hay marcha atrás! Así que, ¡si no te mueves hacia delante, entonces te estás moviendo hacia atrás! Y eso es más… de la verdad subyacente del principio del efecto mateo: “A los que tienen todo se le dará más. A los que no tienen nada, todo les será tomado”.

¡Es una advertencia: no te quedes en el mismo sitio!

Según zigzaguees quizás el cataclismo de cada transformación comience a disminuir, no hay tanto de tu que tiene que morir con cada error.

Quizás acabes orientado, al menos, adecuadamente y si fueras sensato, este sería tu viaje. Pero no lo fue, es ese o quizá es mucho peor que ese. Quizá no se den pocos pasos hacia atrás pero eso no importa, porque según avances tropezando, te ilustras e informas a ti mismo.

¡Y quizás se deba a que el mundo está hecho de información y si vas su encuentro y lidias con él! ¡Entonces te informa y al estar informa y al estar informado, te conviertes en creación y estás preparado!